Seguros para vacacionar
Este año, a causa de la pandemia por el Coronavirus COVID-19, el sueño de salir de vacaciones es como un oasis en el medio del desierto. Hay muchas tensiones y sinsabores que trajo el aislamiento que necesitan ser liberadas a través del esparcimiento, el descanso y el disfrute.
Los sacrificios, transformados en esfuerzos por adaptarse al nuevo escenario son variados y en diferentes frentes, la escolarización en casa, el teletrabajo y el distanciamiento social han presentado ser retos que pusieron a prueba la paciencia, la imaginación y la construcción diaria de una mejor convivencia.
La cercanía del fin de año, la época estiva propicia para realizar una escapada a los destinos turísticos, por lo pronto en el país, se percibe como un premio a tanto sacrificio que las familias argentinas se merecen. Por ello, comienza como un ritual de buenos deseos las conversaciones para planificar las vacaciones.
Este casi ritual que las personas llevan a cabo con un número indeterminado de participantes implica en la actualidad otras cuestiones a evaluar además del dinero que se puede invertir y los deseos de conocer y viajar que nunca pueden faltar. Ahora, más que nunca, parejas, amigos y familias deben poner en juego el arte del diálogo para decidir, por ejemplo, entre visitar lugares nuevos o aquellos ya conocidos, entre los destinos que más preparados están para sobrellevar la pandemia y aquellos que se han declarado más libres respecto a normas.
Ante el panorama mundial, las compañías aseguradoras han diseñado una póliza que cubre ante los inconvenientes que pudieran surgir en vacaciones por contraer COVID-19. Estos recursos han sido solicitados por algunas entidades turísticas como la posibilidad de que los turistas realmente sientan las vacaciones como un descanso, ya que si algo llegara a ocurrir se sabrán protegidos adecuadamente.
Qué cubren los seguros
Al llegar la inquietud a las compañías aseguradoras, los profesionales decidieron brindar prioridad a aquellos aspectos que de no estar cubiertos transforman el descanso en una terrible pesadilla y un derroche innecesario de dinero.
Así es que gracias a los acuerdos que cada firma ha podido cursar con las diferentes entidades intervinientes, los seguros cubrirán el costo del alojamiento por un tiempo de 14 días (que implicaría un aislamiento en caso de dar positivo) en diferentes hoteles para las personas que necesiten aislarse. Otro ítem fundamental para la tranquilidad de los turistas son los gastos que implican el hisopado o prueba PCR que también se realizará por cuenta de la aseguradora.
Pero las coberturas amplían las posibilidades de protección ofreciendo gestiones y cargo del cambio de los pasajes aéreos o terrestres, además del costo por traslado a centros de salud de cierta especialización y hasta el arancel que implique cancelar las reservas del hotel, si el asegurado se enfermase días antes de viajar.
¿Seguro obligatorio?
Desde el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación se informó que los seguros para turistas ante el COVID-19 no se presentan desde el ente como un requisito obligatorio para viajar, pero que cada jurisdicción puede solicitarlo a sus visitantes en caso de considerar que su localidad no posee los recursos para enfrentar los gastos que pudieran surgir del contagio de los turistas.
Todavía no se aprobó la apertura de los destinos turísticos y las primeras habilitaciones están pensadas al turismo local dentro de las provincias. Seguramente, con la experiencia de los primeros viajes se podrán ajustar medidas, protocolos y solicitudes.
Los prestadores de turismo están ansiosos por activar nuevamente su trabajo, pero comprenden que estar a la altura de las circunstancias es fundamental para que los servicios sean de calidad y seguros para todos.