La espera necesaria

Hace poco los medios santafesinos cronicaron la situación en la que una señora a bordo de su auto, y por motivos que se desconocen, cayó en un pozo de un metro de profundidad que se encontraba en el medio de la calle por unas obras que se estaban realizando en el lugar. El accidente se produjo de noche y no fue hasta el otro día que el auto fue removido del lugar.
hace 3 años, 6 meses
La espera necesaria

Sin ahondar en el hecho de quién fue la responsabilidad ni los pormenores que suscitaron el hecho, nos interesa destacar que la conductora les pedía a los operarios que habían realizado la perforación que sacaran su auto, a lo cual los trabajadores contestaron que no podían porque no estaban autorizados por la propia aseguradora de la mujer, a los fines de no estropear aún más el vehículo.

Esta historia verídica y que no requiere mayor información, nos sirve de ejemplo para graficar que nadie quiere sufrir ningún tipo de accidente ni percance con su vehículo; sin embargo, las cosas pasan y es indispensable comprender cómo actuar antes de vivir hasta lo más mínimo como la mayor catástrofe.

En el ámbito de los seguros de auto se aplica a la perfección dos frases habitualmente escuchadas: “difícil es que se valore lo que no se conoce” y “vísteme despacio que estoy apurado”.

Vísteme despacio que estoy apurado

Es común que la gran mayoría de las personas demuestre siempre un apuro para todo porque la sociedad se acostumbró a ritmos de vida en los que pareciera que si no está presente la inmediatez las cosas están mal hechas.

Esta vorágine en la que el mundo parece estar cada vez más metida, lleva a que se resigne calidad en favor de no perder tiempo o incluso también que no se visualice que no se están obteniendo productos/servicios de calidad, lo cual es mucho peor aún. Es peor porque si los consumidores, de cualquier ámbito o sector, decidimos de manera consciente elegir velocidad por sobre todas las demás variables es una cosa, pero no poder ver y comprender las consecuencias de nuestras decisiones ya es otro juego.

Esta corriente tan de moda no hace más que impedir que los procesos sigan los canales y procesos adecuados poniendo como prioridad el concepto de lo rápido por sobre la calidad que se debe obtener.

Desde CompreSeguros.com no estamos argumentando a favor de la burocracia ni las pérdidas de tiempo innecesarias, sino que estamos exponiendo que las cosas llevan su tiempo y resulta indispensable que las compañías de seguros y asegurados sean conscientes de esto para lograr acuerdos de convivencia.

Difícil es que se valore lo que no se conoce

El exceso de velocidad sumado a la poca información con la que algunos asegurados se manejan lleva a que no se valore en esencia a los seguros, en este caso de auto, como herramientas y productos que están diseñados y aplicados en favor de los propios clientes además, obviamente, de la sociedad en su conjunto.

Si la mala información, la ceguera de los clientes o la baja capacidad comunicativa de algunas aseguradoras prima, los resultados nunca son buenos y los enojos se vuelven moneda corriente. Quién no tiene algún ejemplo cercano que, con detenerse y analizar, descubre cuán errado ha estado.

Es por ello que quienes formamos parte de CompreSeguros.com practicamos la atención personalizada y con el tiempo que cada asegurado necesita, a los fines de que nadie reciba menos de lo que merece, pero sobre todo que aprecie y valore el paso que da al contratar un seguro.

Quiera y exija, pero no antes de saber: qué y cómo.