Agotamiento, golpes de calor y seguros
El calor parece no dar tregua y los veraneantes están de para bienes debajo de un árbol, al lado de un río o en cercanías de la playa donde esta situación se recibe como una bendición en tiempos de merecido descanso. Sin embargo, la situación no resulta tan agradable para todos y es ahí cuando el calor puede convertirse en un verdadero problema si no se le presta la atención adecuada.
Los problemas de agotamiento por calor y golpes de calor, los cuales son más complicados, se convierten en uno de esos clásicos que se viven según las temporadas como también lo son los accidentes por uso de pirotecnia para fin de año. Con establecer un cronograma de los clásicos de clásicos obviamente no alcanza. Lo importante es entender esta situación para poder reducirla al mínimo porque no discrimina entre animales y personas, entre niños, jóvenes, adultos y ancianos.
En este artículo le contamos qué es el agotamiento y el golpe de calor y los cuidados elementales para poder disfrutar del verano cómo se debe.
Qué son el agotamiento y el golpe de calor
Los especialistas explican de manera sencilla que ambos son trastornos que se ocasionan por el aumento de la temperatura corporal causados por diversos factores como puede ser la exposición prolongada a altas temperaturas ya sea por trabajo, deporte o incluso ocio, lo que provoca en el organismo dificultades para regular su propia temperatura.
El agotamiento es un estadio anterior al golpe y por ende presenta síntomas más moderados, el golpe de calor se caracteriza por ser una “forma grave de lesión por calor y la temperatura del cuerpo alcanza los 40° C o más”, tal como se explica desde el Ministerio de Salud de la Nación.
Algunos de los síntomas más comunes del agotamiento por calor pueden ser sudoración excesiva, calambres, dolores de estómago y cabeza, irritabilidad, debilidad, cansancio y sensación de calor agobiante.
Por su parte los síntomas del golpe de calor pueden ser temperatura corporal por encima de los 39°C medidos en la axila, aceleración en la respiración y frecuencia cardíaca, dolores de cabeza, ausencia de transpiración, convulsiones y una marcada alteración en el comportamiento del afectado.
Es importante comprender que tanto el agotamiento como el golpe pueden darse con mucha frecuencia en niños y adultos mayores que no siempre están en condiciones de percatarse o de comunicar aquello que les sucede.
Prevenciones y un gran riesgo
Los especialistas explican que no es difícil cuidarse de estos trastornos siempre que se sigan acciones tan sencillas como efectivas. En el ranking de prevenciones sin duda todo comienza con el respeto de los horarios indicados como no propicios para realizar actividades físicas, en la medida de lo posible, resguardarse en esos lapsos.
Resulta indispensable también mantener la hidratación corporal con agua, no bebidas con exceso de azúcar o alcohólicas, alimentarse con frutas y asegurarse una buena ventilación que ayude a mantener fresco el recinto donde se encuentra.
Tanto el agotamiento como el golpe de calor pueden presentar alteraciones del estado mental. Mareo, desorientación y confusión se encuentran entre los síntomas más suaves por lo que es conveniente, ya sea que trabaja o hace deportes, que cuente con un seguro de accidentes personales que lo proteja de riesgos mayores.
Si desea conocer en profundidad lo que un seguro de accidentes personales puede hacer por usted y su familia no lo dude, en CompreSeguros.com podemos asesorarlo para que tome una decisión inteligente que le permita disfrutar del calor, tanto si es al lado del agua refrescante como si tiene que seguir con su rutina diaria, pero con la seguridad de saberse protegido.