10 consejos para que el sillón dure décadas

Desde Homero Simpson hasta Pepe Argento, muchas series y películas se han encargado de demostrar la función e importancia de los sillones en la vida de las personas en el ámbito hogareño.
hace 1 año, 5 meses
10 consejos para que el sillón dure décadas

Los sillones, tal vez junto con el equipo de música y los televisores, representan el alma del living y, a su vez, este último es el corazón del hogar. Sin embargo, por cariño y cuestión de costos el sillón empieza a pedir a viva voz una mínima demostración de cariño.

Si usted es de aquellas personas que no ha podido cambiar el sillón o quiere conservar el que tiene desde tiempos inmemoriales, le brindamos los mejores consejos para que su sillón pueda durar décadas.

De la comodidad al olvido sin escalas

En 11 ideas para elegir el mejor sillón contamos que este, en general, es mucho más que un simple mueble para las personas. En este se pasan muchos momentos importantes, desde risas hasta llantos, en soledad o rodeado de seres queridos.

La elección suele estar supeditada a las condiciones de la casa como puede ser el espacio y la funcionalidad del espacio, pero en otros la decisión es más radical siendo este último el que lleva a determinar la idoneidad de la casa o departamento en cuestión.

Por el motivo que sea que se haya elegido, el sillón no necesita de grandes cuidados para que se conserve en buenas condiciones, pero si de una atención constante y sistemática si se espera que su vida útil no termine siendo la de contenedor de objetos en la pieza del fondo o pagando para que alguien quiera hacernos el favor de llevarlo para deshacerse de él.

Un sillón por décadas sin problemas

Tal vez no sea su intención cuando recibe de regalo un sillón ni menos cuando aparecen esas oportunidades comerciales por el Mundial FIFA de Fútbol o días de ventas especiales, pero los vendedores de sillones suelen decir, como quien no quiere la cosa, que estos bien cuidados pueden durar décadas sin problemas ni lamentos.

Para que sea el alma del living y por ende del hogar, preste atención a estos 10 fáciles consejos para cuidar su sillón y sentirse feliz en él.

Cuidar en el sentido estricto de la palabra: el primer punto es polémico y recuerda la relación de las personas con los autos en la que las aguas se divide en dos grandes grupos. Por un lado, están aquellas personas que no quieren ni respirar fuerte ni utilizarlo en días de lluvia para que nada malo le pase y otros que asumen que el auto está a su servicio y como tal lo usan bajo las circunstancias que toquen. Lo mismo sucede con el sillón, los expertos dicen que si se desea que duren por décadas tiene que ser territorio prohibido para mascotas, niños que no se sepan comportar y actividades que excedan la tertulia y la ingesta de alguna bebida.

El consejo más saludable es que amolde el concepto cuidar a sus gustos y realidades, como primera medida.

Aunque no lo veamos el polvillo siempre está: los expertos suelen utilizar esta idea para que al momento de limpiar el espacio se entienda que es necesario hacer lo propio con el sillón. Toda la tierra y ácaros, tan nocivos para la salud de las personas, que se pueden barrer debajo de la mesa, sacar de las cortinas y muebles, también estarán presentes con mucha comodidad en el tapizado del sillón. Para lograr que la vida útil se pueda alargar cada vez que se limpie la casa hay que aspirar cada resquicio que tenga su sillón, más aún si es centro de descanso de perros y gatos o centro de acrobacias para los más pequeños del hogar.

Corra, pero con cuidado: otro gran secreto para conservar el sillón como recién comprado es estar atento a limpiar cualquier tipo de accidentes, desde un simple vaso con agua que se derrama hasta las bebidas más espirituosas. La clave además de utilizar productos que no sean abrasivos en el fragor de la limpieza es que cada producto usado sea acorde al material del tapizado y el esqueleto del cuerpo. Si vale la comparación, es similar a lo que sucede con los seguros de autos que siempre deben pensarse en función del propio vehículo y sus características, pero también en el uso y costumbre de sus conductores.

Productos adecuados para sillones impolutos: aunque pueda parecer que a muchas personas se les va la mano, no es así. Para que su sillón sea cómodo, saludable y den ganas de hacer uso de él es importante comprender que su rendimiento y conservación puede cuidarse con detalles como no utilizar elementos cortopunzantes en él o mejor aún adquirir productos como anti manchas que les quitan chances a los accidentes que luego tan caro pueden resultar en lo económico y anímico también.

Tan descolorido que da pena: un detalle importante que es necesario resaltar es que nadie se siente a gusto, incluso las emociones pueden ser desfavorables, de estar o utilizar cosas que no están en su mejor estado. Desde una bicicleta que hace ruido al andar generando la sensación que todos se dan vuelta a mirar hasta un sillón que ya no conserva ni rastro de su color generan esa sensación de tristeza y derrota. Para evitar que el tapizado se malogre es indispensable cuidar las exposiciones prolongadas del sillón al sol, pudiendo protegerlo con cortinas o incluso cerrando las persianas si fuese necesario. Este consejo escapa al hecho de que se rompa en sí mismo, sino más bien que pueda generar buenos momentos.

Los niños afuera: una vez más los especialistas gustan de hacer hincapié que la durabilidad del sillón está estrictamente ligada a la rigurosidad de su cuidado, por ejemplo, en el caso de los niños. En este caso la recomendación apunta a no permitir que los chicos salten desde los apoyabrazos, cabalguen los respaldares o cualquier otro tipo de actividades que termine dañando la estructura del mueble e incluso sea un llamador de los accidentes personales. En otras palabras, de acuerdo al consejo de los expertos, si de verdad quiere que los sillones puedan durar décadas como recién comprados es indispensable que los niños estén educados respecto al buen uso.

Compre pensando en usuarios y futuro: todo lo antes dicho representan buenos consejos para que los sillones duren sanos, limpios y confortables el mayor tiempo posible, pero falta ahondar un poco más. Al momento de adquirirlo es importante pensar en quiénes lo han de usar, por caso teniendo en cuenta su comportamiento, hábitos y condiciones físicas, pero también en cómo estos han de influir en la elección de un tapizado que sea resistente ante estas variables. Pensar en el futuro significa analizar los pro y contras de la inversión que está por llevar a cabo en base a las distintas posibilidades salidas de una tela u otra, del cuerpo de un material u otro.

Los detalles importan: cuando se toma la decisión de limpiar el tapizado porque se ha manchado o bien porque ya es tiempo de hacerlo, los expertos recomiendan tener presentes dos ideas fundamentales. Por un lado, el hecho clave de llevarlo con profesionales que puedan hacer un trabajo seguro y de confianza para que el resultado sea verdaderamente óptimo y, por otro lado, si no se quiere tener un sillón que representa una paleta de colores en pocas piezas es indispensable entender que no se lava/limpia por partes porque el desgaste que se ocasiona se ve en el color y conservación del tapizado. Similar al punto anterior, hay que prestar atención al futuro, porque los detalles importan.

Siguiendo los consejos a rajatabla: cuando se adquiere un sillón, como otros elementos queridos para su propietario, por ejemplo, un automóvil, monopatín eléctrico o una cámara de foto, es común que las personas presten atención a los consejos de los profesionales. Pero la emoción que implica la adquisición lleva a que las cosas se olviden, cuando no que se malentiendan. En el caso de los sillones que poseen almohadones es indispensable seguir las recomendaciones de rotación y peso idealmente aceptado, más si el objetivo es disfrutar de estos durante décadas. Cuando no esté seguro de alguna idea es mejor acercarse a la casa donde se adquirió para salir de dudas antes de estropear algo que seguramente ha significado mucho esfuerzo tener.

Las malas palabras: pinturas, remodelaciones y mudanzas son tres malas palabras cuanto a sillones se refiere. Esto está íntimamente ligado con el estrés que estas acciones generan en las personas que, incluso de manera involuntaria, terminan haciendo sacrificios para que estas tres malas palabras puedan resolverse rápidamente. Mantas protectoras, embalajes adecuados y profesionales cuidadosos son algunos de los conceptos que permiten que las malas palabras se puedan reconciliar con los sillones y sus propietarios por la salud y bienestar de todos.

Desde CompreSeguros.com le deseamos que estos consejos sean de utilidad para usted, su familia y su sillón y, así, que por mucho tiempo sea el punto de risas y encuentros.