La virología cumple un rol fundamental en la salud y el bienestar de una sociedad en su conjunto. Los virólogos trabajan investigando aquellos virus que afectan, o pueden hacerlo, tanto a los seres humanos como animales y plantas, por lo que su entorno no se circunscribe exclusivamente a un hospital o clínica sino a diversas áreas más amplias que el ámbito de la salud.
Del trabajo esforzado, profesional y, muchas veces, inadvertido por el gran público realizado por los virólogos se conocen y se combaten un sinnúmero de enfermedades. En su quehacer diario los profesionales realizan análisis y diferentes estudios en laboratorio, dan seguimiento a los procesos que presentan los pacientes, investigan y diseñan tratamientos, vacunas y formas de combatir los virus.
Una de las tareas primordiales en la labor de los virólogos es trabajar de manera mancomunada con otros profesionales de la salud como es el caso de hematólogos y patólogos solo por mencionar algunos.
El trabajo realizado por los virólogos implica mucho riesgo por el material que manipulan y las consecuencias que este trae aparejado, es justamente por ello que resulta indispensable para los profesionales contar con un seguro adecuado que brinde protección ante un potencial caso de mala praxis o reclamo legal como consecuencia de las labores que lleva a cabo.
Para todos los profesionales en virología las empresas aseguradoras ponen a su disposición pólizas de mala praxis que brindan cobertura para eventuales situaciones que pueden trastocar su reputación y patrimonio por el ejercicio de su trabajo. Entre los servicios que cubren las pólizas se pueden mencionar la asesoría legal ante casos médicos, la defensa en casos civiles y penales ya sea en juicios o apelaciones, respuesta ante indemnizaciones, tanto por acuerdos extrajudiciales como en condenas en juicio civil, y asistencia durante mediaciones o presentaciones ante tribunales éticos.