La Segunda coloca a los asegurados en primer lugar brindándole respuestas y coberturas que le permitan desarrollar sin problemas sus actividades cotidianas. Un ejemplo acabado de esta situación es el Seguro Embarcaciones que es una invitación concreta y formal a poder navegar seguro.
Los propietarios de veleros, lanchas y cruceros encuentran en La Segunda la respuesta adecuada para hacer de sus pasiones una actividad completamente segura tal y como cada cliente lo siente necesario. Esto implica también que desde la aseguradora se garantiza protección para los bienes patrimoniales ante una serie de riesgos potenciales a los que todos pueden verse expuestos.
El hecho de que los riesgos igualen a las personas no quiere decir que entiendan, sientan y requieran la misma protección al contratar un Seguro Embarcaciones, pero es allí donde la compañía saca a relucir toda su capacidad y profesionalismo para brindarle a cada asegurado y su familia exactamente lo que están necesitando acorde a sus realidades.
El Seguro Embarcaciones en La Segunda significa la posibilidad concreta para que, los amantes de la náutica y propietarios de veleros, lanchas y cruceros, elijan entre una Cobertura Básica y un Plan Todo Riesgo que los impulse a navegar con una seguridad a medida.
La Cobertura Básica es, según el propio diseño de la aseguradora, una primera protección que resguarda “contra los daños totales de tu embarcación, mientras ésta esté navegando, en puerto, dársena, guardería, mientras es sacada de la guardería por medios mecánicos, durante las operaciones de sacada a tierra y botadura y también, durante la operación de reparaciones normales o de grandes trabajos de reparación”.
Las coberturas incluidas son “Naufragio; Varamiento; Incendio, rayo y/o explosión; Temporal; Choques con otra embarcación, muelles y, en general, cualquier objeto fijo o flotante; Gastos de salvamento; Robo total de la embarcación en el domicilio” y como adicionales Responsabilidad Civil y Transporte en tráiler.
Por su parte el Plan Todo Riesgo significa obtener la posibilidad de navegar tranquilo al contar el asegurado con máxima protección para su embarcación. Desde La Segunda se explica que con Plan Todo Riesgo se protege la embarcación “de daños totales y parciales, mientras ésta esté navegando, en puerto, dársena, guardería, mientras es sacada de la guardería por medios mecánicos, durante las operaciones de sacada a tierra y botadura y también, durante la operación de reparaciones normales o de grandes trabajos de reparación”.
Las coberturas del Plan son “Naufragio; Varamiento; Incendio, rayo y/o explosión; Choques con otra embarcación, muelles y cualquier objeto fijo o flotante; Temporal; Robo total de la embarcación en guardería o taller náutico; Gastos de salvamento; Robo total de la embarcación en el domicilio; Hurto y Chinchorros”, pero además como adicionales se obtiene también Responsabilidad Civil y Transporte en tráiler.