El Progreso Seguros S.A. nació en el año 1898 en Pigüe en la provincia de Buenos Aires y es hoy en día una de las empresas más antiguas del país. La trayectoria de esta centenaria compañía de capitales argentinos y raíz cooperativista ha estado siempre marcada por el compromiso para con los asegurados y la comprensión acabada de la evolución permanente que una compañía de seguros debe tener, no solo para sobrevivir sino para destacarse y ser líder como lo es El Progreso.
El Progreso Seguros dispone de productos que categoriza en seguros patrimoniales y seguros personas. Entre los primeros se encuentran, por ejemplo, transportes; automotores; cristales; robo; responsabilidad civil; seguro técnico; riesgos varios e incendio. Este último resulta crucial en la vida de las personas y empresas por lo que representa este siniestro en la vida, economía y patrimonio de los asegurados.
El seguro de incendio de El Progreso, en su cobertura básica, “ampara los daños a los bienes objeto del seguro por la acción directa o indirecta del fuego, rayo o explosión. Se entiende por fuego toda combustión que origine incendio o principio de incendio”.
La compañía aseguradora con esta póliza también ampara los daños materiales directos que pudieran producirse a causa de “hechos de tumulto popular, huelga y Lock-out, incluidos los hechos de terrorismo originados en los referidos acontecimientos; otros hechos de vandalismo, terrorismo y malevolencia, aunque no se originen en las circunstancias descriptas en la anterior descripción y siempre que no formen parte de hechos de guerra civil o internacional, rebelión, sedición o motín o guerrilla; impacto de aeronaves, vehículos terrestres, sus partes componentes y/o carga transportada y humo que provenga, además de incendio ocurrido en el bien asegurado o en las inmediaciones, de desperfectos en el funcionamiento de cualquier aparato que forme parte de la instalación de calefacción ambiental y/o cocina instalados en el riesgo asegurado y siempre que en el caso de quemadores de combustibles se hayan previsto los correspondientes conductores para evacuaciones de gases y/o humo, conforme a las reglamentaciones en vigor”.
La descripción minuciosa que realiza El Progreso respecto a su producto y las coberturas que ella asume expone, ante los asegurados y el público en general, el espíritu y compromiso de honestidad y capacidad que la han caracterizado en su extensa historia.
Esta historia, más viva que nunca y a la que se ha integrado La Territorial Vida y Salud Compañía de Seguros S.A., cuenta en la actualidad de una red de productores y asesores de más de doscientos profesionales que asumen la responsabilidad de representar a la aseguradora allí donde cada asegurado lo necesita y en el momento que lo precisa.
A diario en toda la República Argentina se realiza transporte de diferentes tipos de mercaderías que hacen que funcione la economía y se desarrollen las industrias en su conjunto, pero, sobre todo, que la sociedad encuentre aquellos productos que necesita, de la manera en que lo precisa.
El Progreso es una empresa integrada por profesionales que se interesan por brindar a los clientes experiencias de satisfacción. Lo primero para lograrlo es aprender a escuchar sus necesidades y trabajar en el diseño de pólizas con respuestas puntuales y oportunidades de adaptación a cada cliente en particular.
Las situaciones de robo, lamentablemente, se repiten más de lo que la mayoría quisiera y las modalidades se unen al ingenio para que cada día más damnificados sufran las inclemencias de delincuentes que van por todo. Así es que las aseguradoras deben trabajar no solo en dar respuesta a los delitos de robo que ya conocíamos, sino a todos los que en la actualidad se han vuelto más recurrentes.
El Progreso Seguros ostenta como título invaluable ser la aseguradora de riesgos de Granizo más antigua de Latinoamérica, ya que la conformación de la Cooperativa Progreso Agrícola fue en 1898 la pionera ante uno de los riesgos más terribles del momento. Los avatares climáticos que comprometían la integridad de los cultivos han estado presente en cada época aunque modificándose algunas condiciones.
Las aseguradoras líderes del país son fácilmente reconocibles por su compromiso, respaldo y, también, por su trayectoria. La trayectoria se diferencia con la simple historia porque implica un ejercicio permanente por la búsqueda de la excelencia y la mejora continua.